Llevo varias noches que tengo pesadillas relacionadas con el bebé. Al principio no le dí la mínima importancia pero cuando he visto que se repetían, es cuando he querido compartirlo y mi sorpresa ha sido darme cuenta que es algo normalísimo.

En mis pesadillas, siempre venía el sentimiento de culpa, de responsabilidad, de angustia, etc. Lo curioso de ellos era que el bebé siempre se presentaba en mis sueños con un cuerpo amorfo, feo pero a la vez delicado que para nada tenía que ver con un precioso bebé. Sin embargo, mi preocupación no era que el bebé fuera un bicho raro, sino que se me escurría entre los brazos, que no se enganchaba a mi pecho o que se me caía.

Pues bien, he investigado un poco y he leído que la mayoría de estos sueños se producen justo entre el segundo y el tercer trimestre, que es cuando la mamá toma conciencia de la presencia de su bebé, seguramente debido a que ya se preciben sus movimientos y esto hace que sea mucho más real.
Lo recomendable en estos casos, es que compartas estas angustias con alguien, si puede ser tu pareja o familia mejor, sino cualquier persona que haya vivido este momento te podrá tranquilizar diciendo que es lo más normal del mundo.

¿A vosotras también os ha pasado?

En este enlace podéis encontrar algunos ejemplos de sueños e incluso una entrevista a una psicóloga del Instituto de Ginecología EGR de Madrid.