Que nos gusta viajar es un hecho y si encima se trata de conocer una región antes «desconocida» por nosotros como la Nouvelle-Aquitaine (Nueva Aquitania), pues allá que vamos.
Nos propusieron desde Atout France (Turismo de Francia) y la región Nouvelle-Aquitaine hacer un viaje en familia por la región más grande de Francia y se ha convertido en uno de los viajes más «guays» que hemos hecho en familia.
En este post haré un breve resumen sobre el itinerario que hicimos y que tuvo comienzo en Angoulême, pero probablemente, acabaré redactando algún que otro post más para poder contaros con detalle algunos de los destinos que visitamos.
Os recomiendo que os toméis más tiempo del que tomamos nosotros, ya que algunos destinos como la visita a Futuroscope requieren más de un día para verlo bien.
Nuestro itinerario por la Nouvelle-Aquitaine (Nueva Aquitania)
Cogimos un avión Barcelona-Burdeos (algo más de 1 hora de vuelo) y allí alquilamos un coche. Pero depende de dónde queráis empezar vuestro itinerario, tenéis muchas opciones para viajar hasta allí. Tendréis que ver en cada caso cuál es la opción más óptima.
- Día1: Aeropuerto Burdeos – Angoulême – Pressac (casas flotantes)
- Día 2: Futuroscope
- Día 3: Défi Planet
- Día 4: Limoges
- Día 5: Lac de Saint-Pardoux
La región de Nouvelle-Aquitaine, la más grande de Francia
Como breve introducción os contaré que la región de Nouvelle-Aquitaine (Nueva Aquitania) es la más grande de las 13 regiones que tiene Francia. En la reforma de 2014, se fusionaron las regiones de Aquitania, Poitou-Charente y Limousin para formar la que hoy en día se conoce como región Nouvelle-Aquitaine (Nueva Aquitania).
Su capital es Burdeos, ciudad que visitamos fugazmente durante nuestras vacaciones de 2019 y limita al sur con los Pirineos y al oeste con el Golfo de Vizcaya.
Pero otras ciudades importantes que seguro os suenan también son Pau, Limoges, Poitiers o La Rochelle.
Nouvelle-Aquitaine (Nueva Aquitania) no es sólo un destino veraniego por excelencia, ya que goza de un clima suave y soleado, sino que ofrece a los veraneantes muchas posibilidades de actividades durante todo el año: deporte, cultura y gastronomía. Yo no descartaría visitarla en Navidades, seguro que es de cuento.
Conocemos Angoulême, capital Internacional del Cómic
Nuestro primer paso por la región de Nouvelle-Aquitaine (Nueva Aquitania) fue un precioso paseo por la ciudad, poco conocida por los españoles, de Angoulême (Angulema en español), situada en un trayecto de 1,40h del aeropuerto de Burdeos en coche.
La ciudad histórica de Angoulême, queda a tan solo 1,40h de París y 35 minutos de Burdeos en tren de alta velocidad, y es conocida como la Capital Internacional del Cómic, gracias a su famoso festival (a finales de enero), su Museo del Cómic y sus paredes pintadas.
Visitar la ciudad de Angoulême es como leer un tebeo y pasar sus hojas a todo color. Toda ella forma parte de un gran cómic universal en el que las calles se escriben dentro de bocadillos.
La ciudad que homenajeó a Hergé (el creador de Tintín) con el busto del escultor chino Tchang Tchong-Jen, alberga varias escuelas que forman a los futuros profesionales del cómic, la animación, el audiovisual, los efectos especiales, los videojuegos, las industrias gráficas, etc.
De ahí que sea una ciudad mayoritariamente de población joven.
Un paseo por la ciudad histórica de Angoulême
Tan solo estuvimos unas horas pero nos sirvió para hacernos una idea de lo bonita que es la ciudad y el ambiente tan juvenil que se respira en sus calles.
Empezamos en la Plaza del Ayuntamiento con una visita guiada organizada por la oficina de turismo que nos explicó un montón de curiosidades sobre la ciudad. Mientras esperamos, los peques pudieron jugar en un parque situado en los jardines de la plaza.
El centro de la ciudad está construida con una piedra blanca que aún mantiene restos de conchas, señal que en un tiempo esa piedra estuvo bajo el océano.
Seguimos el paseo bordeando las murallas de Plateau (un paseo muy recomendable con unas vistas magníficas) dando una vuelta por las orillas del Charente. Durante el paseo pudimos disfrutar de algunos de los impresionantes 20 murales en fachadas que ofrece la ciudad.
Si tenéis especial interés en verlos todos, hay una ruta específica para recorrerlos uno a uno.
Hicimos una breve parada en Place des Halles para visitar el mercado cubierto de Angulema (¡con lo que me gusta a mí un mercado!). Allí te esperan productores y productos locales y una curiosa fuente en honor al Dios Baco.
Visita de Angoulême con niños
Sin duda, me quedé con las ganas de hacer el circuito completo de murales, pero el tiempo no nos daba para más. Si viajas con niños te recomiendo que pases algo más de tiempo en la ciudad. En la web oficial de turismo de Angoulême encontrarás un montón de planes para disfrutar con niños.
Acabamos comiendo en el barrio medieval de Angoulême, la parte más antigua de la ciudad, toda adoquinada y peatonal, que bien recuerda al barrio de Montmartre parisino, en un tradicional bistrot llamado Le Chat Noir.
Otra idea que te dejo es si tienes algo más de tiempo que nosotros, una manera divertida de descubrir la ciudad con los niños es a través de la app de geocaching Terra Aventura que te mostrará la ciudad de un modo sorprendente y lúdico.
Os dejo un vídeo resumen con las historias que publiqué en mi cuenta de Instagram sobre nuestro paso por esta preciosa ciudad. ¿La conocías?
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